Las preguntas resultan evidentes: ¿son eficaces?, ¿qué llevan?, y lo más importante: ¿son peligrosos? La mayoría no solamente no funcionan, sino que además contienen productos químicos o sustancias que ponen en peligro la salud.
TIPOS DE PRODUCTOS ADELGAZANTES
Podemos clasificarlos en función del efecto que provocan:
Diuréticos: los médicos los prescriben para combatir la retención de líquidos, pero si se toman sin necesidad, lo que hacen es reducir el agua del cuerpo, provocando deshidratación y bajadas de los niveles de potasio, que pueden llevar a la hospitalización.
Laxantes: los podemos encontrar en forma de pastillas, hierbas, jarabes… Lo que hace un laxante es estimular el intestino grueso, para que se vacíe con más facilidad. Esto se lleva a cabo después de que los alimentos y las calorías hayan sido absorbidos a través del intestino delgado. Por lo tanto, el que consume laxates para adelgazar sólo sonsigue la eliminación de fluidos. El uso continuo de laxantes causa deshidratación, hinchazón, pulso irregular… Y cuando se deja de utilizar, se siente debilidad y dificultad para ir al baño con normalidad.
Disminución de la absorción de grasa: como su nombre indica, tratan de impedir, o al menos disminuir, la cantidad de grasa que absorbe el organismo. No deben utilizarse para perder peso, porque pueden llegar a ser peligrosos.
“Quitahambres“: tratan de calmar el apetito mediante fibras que se hinchan en el estómago y dan sensación de saciedad. Pueden resultar dañinos para personas que no estén acostumbradas a consumir fibra. Las pastillas que provocan esta sensación contienen efedrinas, que actúan de manera similar a las anfetaminas. Si quieres conseguir sensación de saciedad de una manera natural, come frutas y verduras ricas en fibra.
Aceleración del metabolismo: estos productos se venden bajo eslóganes de tipo “Queme calorías mientras está tumbado en el sofá“. Es algo falso, ya que para ello el cuerpo debería tener una temperatura muy elevada.
Jarabe de Ipecac: se hace de la raíz seca de una planta llamada ipecacuana, que se cultiva en Brasil. Se utiliza para provocar el vómito en los casos de intoxicación por sobredosis de droga. Su utilización fuera de este propósito no está recomendada. Se debe utilizar con precaución y bajo las indicaciones del médico, ya que puede llegar a causar la muerte instantánea.
Efectos secundarios
Como te hemos contado antes, estos productos pueden ser peligrosos y llevar a una persona a caer en enfermedades como anorexia, bulimia, deshidratación, lipotimias, edemas, atrofia muscular, hipo o hipertensión, alteración en el ciclo menstrual, úlceras gástricas, anemias, depresión… Una larga lista que no acaba aquí y que no debe tomarse a la ligera.
Diuréticos: los médicos los prescriben para combatir la retención de líquidos, pero si se toman sin necesidad, lo que hacen es reducir el agua del cuerpo, provocando deshidratación y bajadas de los niveles de potasio, que pueden llevar a la hospitalización.
Laxantes: los podemos encontrar en forma de pastillas, hierbas, jarabes… Lo que hace un laxante es estimular el intestino grueso, para que se vacíe con más facilidad. Esto se lleva a cabo después de que los alimentos y las calorías hayan sido absorbidos a través del intestino delgado. Por lo tanto, el que consume laxates para adelgazar sólo sonsigue la eliminación de fluidos. El uso continuo de laxantes causa deshidratación, hinchazón, pulso irregular… Y cuando se deja de utilizar, se siente debilidad y dificultad para ir al baño con normalidad.
Disminución de la absorción de grasa: como su nombre indica, tratan de impedir, o al menos disminuir, la cantidad de grasa que absorbe el organismo. No deben utilizarse para perder peso, porque pueden llegar a ser peligrosos.
“Quitahambres“: tratan de calmar el apetito mediante fibras que se hinchan en el estómago y dan sensación de saciedad. Pueden resultar dañinos para personas que no estén acostumbradas a consumir fibra. Las pastillas que provocan esta sensación contienen efedrinas, que actúan de manera similar a las anfetaminas. Si quieres conseguir sensación de saciedad de una manera natural, come frutas y verduras ricas en fibra.
Aceleración del metabolismo: estos productos se venden bajo eslóganes de tipo “Queme calorías mientras está tumbado en el sofá“. Es algo falso, ya que para ello el cuerpo debería tener una temperatura muy elevada.
Jarabe de Ipecac: se hace de la raíz seca de una planta llamada ipecacuana, que se cultiva en Brasil. Se utiliza para provocar el vómito en los casos de intoxicación por sobredosis de droga. Su utilización fuera de este propósito no está recomendada. Se debe utilizar con precaución y bajo las indicaciones del médico, ya que puede llegar a causar la muerte instantánea.
Efectos secundarios
Como te hemos contado antes, estos productos pueden ser peligrosos y llevar a una persona a caer en enfermedades como anorexia, bulimia, deshidratación, lipotimias, edemas, atrofia muscular, hipo o hipertensión, alteración en el ciclo menstrual, úlceras gástricas, anemias, depresión… Una larga lista que no acaba aquí y que no debe tomarse a la ligera.
